El arcus que se comió Madrid

El día 22 del pasado mes de Mayo (no el 23, como aparece en los vídeos), una gran tormenta afectó a la zona sur de Madrid. Ese día, un komando de SSW formado por Angel Araújo (vídeo), Luis Miguel González (fotos) y Emilio Rey (Coordinador de SSW), salieron por la tarde para interceptarla. Pedro Serrano y Eugenio Arenas estaban de apoyo al teléfono, en contacto con Jose Antonio Quirantes, del INM.

Las imagenes de calidad profesional formarán parte de otro informe, pero tuvimos la oportunidad de filmar algún vídeo, con una cámara de fotos. No es de muy buena calidad, pero da una idea de lo que pasó aquella tarde, y os las presentamos absolutamente en primicia. Nunca hasta ahora habían sido difundidas.

Hemos buscado mucho para ver si alguien nos confirmaba la formación de un tornado esa tarde, pero no hemos encontrado nada. Nosotros, sin embargo, tenemos una filmación del arcus entrando en Madrid donde parece apreciarse algo...

Aquí os dejamos la historia de esa increible tarde de kaza, son 13 vídeos ordenados cronológicamente, en donde podreis ver y oir lo que pasó. Las voces son de Luis Miguel y Emilio. Angel iba en coche aparte.

Comenzamos recorriendo la Nacional V, dirección Badajoz, en busca de una tormenta que subía por el sur, y que traía reflectividades amarillas y naranjas.

En Santa Cruz de Retamar seguimos persiguiendo la parte más severa de la tormenta, un arcus con actividad electrica, aunque no damos con una buena posición, y terminamos por meternos dentro.

Seguimos más adelante y decidimos salirnos en Quismondo. La tormenta, hasta ese momento, no presentaba signos de severidad, más allá de alguna granizada leve. Seguimos sin ver la tormenta con una buena perspectiva, nos hemos metido demasiado en nuestro afán de kazarla.

Después de varias paradas y volver hacia Madrid, salimos de la N-V y ponemos dirección a El Alamo, donde parece reactivarse la tormenta por el sur. La actividad eléctrica se recrudece por momentos y decidimos parar bajo la estación de servicio de entrada al pueblo, en un techado. En pocos minutos comienza una granizada muy abundante, aunque con granizo de menos de 2 cm. El diluvio universal se desencadena, y la actividad eléctrica es frenética.

Seguimos la kaza, despues de habernos pasado por encima un auténtico aluvión de agua y rayos, camino hacia la N-V otra vez, y dirección Madrid, donde parece que algo se está cociendo, según Pedro, que acaba de hablar con Rayo y nos dice que llegan echotops de 16 Km de altura...

A partir de ahí, nos encontramos con precipitación intensa, camino de Madrid, donde otra gran célula tormentosa, parece que más activa, está entrando por el sur. ¿Llegaremos a tiempo? Luismi aprieta el acelerador.

Parece que sí, de camino a Madrid, comienza el verdadero espectáculo. El arcus nos alcanza por nuestra izquierda, subiendo desde el sur de Madrid, y acompañado de tonalidades verdosas.

La tormenta engulle Madrid desde el sur, y aceleramos para que no nos alcance a nosotros, ya que perderíamos la perspectiva del arcus dentro del grueso de la precipitación. Desgraciadamente, la autopista AP5 tiene un talud a su derecha, y nos tapa la vista completa. Además, tiene muy pocas salidas. Nos damos cuenta de que hemos cometido un error y vamos a perdernos lo mejor...

...o no. Giramos al norte y acompañamos el frente de la tormenta. Se ven los cielos claros al norte y bajo el inmenso arcus que se come Madrid, nos parece apreciar algo muy sospechoso en lontananza. Atentos a la segunda mitad de este vídeo.

Comentadnos qué os parece, si toca o no tierra la curiosa formación bajo la nube.

Por fín, bien situados, entramos en Madrid, con la tormenta a nuestra derecha, contemplando un espectáculo eléctrico impresionante.

Prosigue el espectáculo eléctrico tras el arcus que literalmente, se come Madrid.

Ya casi en la M30 sur, sigue la increible actividad eléctrica. La tormenta está a punto de colapsar la M30 con la fuerte precipitación.

Visión final del arcus, según enfilamos la M30. Diez minutos más tarde se desencadenó la brutal tormenta encima nuestro. Y sí, la M30 se colapsó.